Volkswagen Escarabajo '54



Historia

Todo comienza un aburrido día de verano. Yo aún estaba esperando para ponerme a trabajar cuando de repente me encontré con unos amigos que estaban de visita en el pueblo. Ellos antes vivían allí pero tuvieron que mudarse a otro sitio y llevaba años sin verlos.

Yo recordaba de años atrás, cuando iba a su casa y ellos poseían este viejo escarabajo del año 54, totalmente impoluto, bajo la tejavana de su patio. Era una pena verlo allí sin darle uso estando en tan buen estado incluso viviendo bajo las inclemencias del tiempo.

Así que yo, ni corto ni perezoso, les pregunté por aquel coche. Ellos me dijeron que aún lo conservaban, aunque no en sus propiedades y que si estaba interesado tendría que ingeniármelas para sacarlo de donde estaba, aunque ya me dieron el aviso de que no tenía motor.

 

Después de un largo verano, por fín conseguí al menos saber dónde se encontraba el coche y pude ir a verlo. Esto fue lo que me encontré:

El coche estaba metido en un patio trasero de una nave, totalmente rodeado por: a la parte de alante y lateral derecho, una pared. A la parte lateral izquierdo, una máquina vieja y oxidada que estaba apoyada en un puntal de obra que justo cruzaba por el hueco del motor y la parte trasera impedía el acceso por 2 piedras enormes de molino.

No tenía nada que hacer. No sabía por dónde sacar el coche sin tener que revolver previamente todo el patio, así que decidí buscar un camión pluma y sacarlo por encima de todo.

Obviamente no fue una tarea fácil, pero después de conseguir el camión pluma y 2 eslingas de 8m ya quedaba menos. Sólamente faltaba cargarlo al camión y transportarlo hasta casa. Para ello fue necesario buscar el equilibrio del coche al levantarlo, pues la parte delantera pesaba más que la trasera al no tener el motor puesto, ni queríamos abollarlo con el propio peso del coche.

Cuando ya estaba en el aire las cosas se veían de otro color.

Una vez estaba el coche encima del camión ya no había de qué preocuparse, pues para bajarlo disponíamos de un torito que nos facilitaría la maniobra. Con esto ya quedaba la mudanza realizada y las luces de su nuevo hogar le resaltaban las curvas de su carrocería.


EL MOTOR

Seguramente todos habréis pensado: "Ha dicho que no tiene motor, pero en ningún momento habla de ello..". Pues es el momento:


Como bien dije antes, el coche no tiene motor. Ya me avisó el dueño de ello antes de ir a por él, pero es algo que me dio un poco igual, pues una oportunidad así no se encuentra todos los días y motores hay más que churros.

Una vez revisado internet para informarme más que nada a cerca de los precios de los motores, ví que en América hay gente que les mete el motor de los subaru impreza, que al igual que el motor de origen, es un motor bóxer o de cilindros opuestos y ya me picó el gusanillo.

Todos los motores que ví había que rehacerlos y al final el precio era casi el mismo que si me plantease la opción de hacer una locura y ponerle el motor de un subaru, así que volví a investigar por internet a ver cómo se hacía la adaptación.


Lo primero que me preguntaba era si el motor entraba a la perfección o habría que recortar algo. Este tema es importante porque demasiado débil es ya el chásis de este coche como para encima tener que recortarlo y debilitarlo aún más.

Después de ver unos cuántos vídeos por la web, me fijé en que exactamente eso dependía del tipo de motor de subaru que eligiese: Si era el monoárbol entraba justo, pero si era el de doble árbol en cabeza tenía que recortar unas esquinitas que no afectaban para nada a la rigidez del coche. También podía decidir entre un motor atmosférico o turbo.

Las dudas cada vez eran más, pero las conseguía resolver poco a poco a base de ver vídeos. La sujección del motor también era muy sencilla, sin tener que modificar nada del vehículo tan solo añadirle unas escuadras de acero con unos agujeros en la parte que me pida el nuevo motor, y para la caja de cambios también ví que había un poco de jaleo.

La caja de cambios tiene su complicación. Por lo que ví había varias formas de hacerlo. Quizá una de ellas y la más sencilla era: usando la caja de cambios original del escarabajo, poner una "rodaja" de aluminio que por una parte adapta al motor y por la otra adapta a la caja, y con eso se pueden aprovechar los palieres que transmiten el giro de la caja a las ruedas, pero no todo es tan bonito, pues también había que poner un volante de inercia modificado y sin ir más lejos, el eje primario de la caja del escarabajo, algo diseñado para soportar un motor 1300cc de serie de 44cv dudo mucho que aguantase la torsión de cualquier motor subaru (115cv aprox. dependiendo del motor).

Ahí empezaban los quebraderos de cabeza.


La siguiente opción y aunque originalmente parecía la más dificil no lo es, es poner la caja de cambios original del mismo motor subaru. He dicho la más fácil, pero no la más barata, os explico.

El subaru lleva el motor alante, con la caja de cambios pegada al motor formando una "T".

El escarabajo lleva el motor atrás, pero la caja de cambios va pegada al motor de modo que hace una "T" pero invertida.

El caso es que si pongo el motor con la caja tal cual, quedarían una bonita marcha alante y 5 marcha atrás... y aunque a priori parezca gracioso, hay que invertirla el giro, y eso es caro.


Indagando por internet, al igual que hay empresas que se dedican a la fabricación de los adaptadores de aluminio anteriormente mencionados, hay empresas que se dedican a fabricar los kits necesarios para invertir el giro a estas cajas de cambio (espero que no tengan que vivir sólo de hacer esto..). Su coste es de 1900$ y nos incluye un eje primario invertido, la corona de diferencial invertida, las puntas de las transmisiones más largas para que no peguen en el chásis, un casquillo estriado que es fundamental para pasar la caja de 4x4 (Todos los subaru tienen tracción 4x4) a sólamente tracción 2 y una tapa que más tarde veremos su ubicación.



Con todo este material, lo único que hay que hacer (según explican los técnicos de la página donde se vende el material) es dar la vuelta al diferencial, lijando unos nervios de la carcasa previamente para que todo entre sin rozar, cambiar todos los engranajes de un primario a otro y ajustar.







Por la parte exterior de la caja, hay que cortar una carcasa a la que le sobran 9cmde longitud y después poner la tapa que decía antes para tapar un agujero y que no se salga el aceite. También hay que tapar 3 agujeritos con unos pegotitos de soldadura. 

Tal y como ya había dicho antes, a priori hace mucha gracia que un coche pueda tener una marcha alante y 5 marcha atrás, pero la que hay que preparar para invertir el giro no es moco de pavo. Aun así está claro que siendo la opción más cara, es la más eficaz, ya que su propia caja de cambios es la que mejor ajustará y la que mejor aguantará la fuerza del motor.

Una vez estaba claro lo que necesitaba, era hora de empezar la búsqueda del motor.

Recorrí todos los desguaces de la comunidad de Madrid, en especial el polígono de San Martín de la Vega, un polígono lleno de desguaces que si no hay una pieza en uno, lo tienes en otro.

Después de un agotador día recorriendo uno por uno sin tener suerte, en el último sitio donde pregunté justo tenían un motor de subaru y para colmo estaba completo (Motor, caja de cambios y toda la electrónica). Se trataba de un 2.0 Turbo de un Subaru Forester que rendía 220cv, pero el precio, el mismo que su cilindrada, impedía que me lo llevase ese mismo día.

A la vuelta de una semana, volví a indagar por algunos de aquellos desguaces, llevándome la sorpresa de que en uno encontré un 2.0 atmosférico de 115cv, pero claro, sin caja de cambios y sin electrónica, aunque su precio ya era mucho más llevadero. Justo ese mismo día, en el desguace de enfrente encontré otro 2.0 atmosférico roto, pero con caja e instalación eléctrica, la cosa ya se empezaba a poner tensa.


Al final, como me avisaron que el coche de la instalación no duraría mucho, me incitó a ir a coger la instalación de ese motor, por lo que pudiera pasar más adelante, y ya con tiempo iría al otro desguace a por el motor.


Con una instalación eléctrica por delante, aun sin tener motor, seguí en busca de algo que mereciese la pena. Yo tenía claro que ya que me iba a poner a hacer el proyecto, tenía que ser un motor potente, que destacase, un turbo, aunque si no quedaba más remedio tendría que ser atmosférico.


Al poco tiempo encontré un Subaru en un desguace de Leganés que justo tenía un 2.2 de 150cv y estaba completo a falta de motor de arranque y alternador.

Gracias a un conocido que trabaja allí, conseguí rebajar el precio  del motor completo a la mitad de lo que me vendían el 2.0 atmosférico, solo que no me daban garantía de funcionamiento..


Mis ánimos cada vez estaban más bajos, pero tenía una idea. Comprar un motor de arranque y probar el motor justo en el mismo desguace antes de desmontarlo.

Cuando fui camino a "Desguaces LaTorre" a por el dichoso motor de arranque, cual fue mi sorpresa al salir a la campa que había un chasis de un Subaru sin motor, pero con toda la electrónica, el motor debía estar dentro de la nave.

Mirando la placa de identificación, pude saber que era un motor turbo, en concreto un 2.5 Turbo de 230cv. La felicidad era inevitable, ahora solo faltaba saber el precio y el estado del motor. Son motores bastante exclusivos así que no sería barato.

Al final, después de verlo y valorarlo, se vino a casa al dia siguiente con instalación eléctrica incluída, solo hay que buscarle una caja de cambios.


LA CAJA DE CAMBIOS

Finalmente, después de mucho buscar a través de la web y de desguaces físicos, he conseguido encontrar una caja de cambios adecuada.

La original del propio motor turbo que compré me costaba casi lo mismo que el motor, por lo que estaba descartada. Aparte, el sistema que utiliza para engranar con las puntas de los palieres no me servía y para hacerlo funcionar necesitaba de otro par de piezas que se me salían del presupuesto, así que para ajustarme tenía que buscar la más adecuada a mi situación.

En otros desguaces de San Martín de la Vega tenían guardadas algunas cajas de cambios de motores 2.0, 2.5, etc que podrían servirme pero que también se me escapaban del precio en ese momento. Tocaría esperar...

Después recordé que el subaru con motor 2.2 del desguace de Leganés del que iba a coger el motor en un principio tenía caja de cambios, aunque estaba totalmente convencido de recordar que el día en que fui a ver ese motor tenía caja de cambios automática. Tuve que volver para corroborarlo y grata sorpresa al ver que no era automática. Era la caja de cambios perfecta!!

Después de hablar con mi conocido allí (al que estoy muy agradecido por todo) consigo sacar la caja por un poco menos de la mitad del precio de lo que me costaban el resto.

Aquí tenemos su referencia y después de volver a comprobar que era la caja de cambios que necesitaba, me pongo a quitarla del vehículo.

 

La verdad es que se quitaba más fácil de lo que pensaba.